Sábado 26/7/2014. Salimos
8,30 al centro de Amboise, el hotel estaba alejado del centro.
Después Thierry nos
llevó hasta un castillo llamado Le Clos Lucé, donde Leonardo Da Vinci vivió los últimos tres años de
su vida. Allí había muebles de época y, lo más interesante, maquetas de los
inventos de Leonardo, increíbles para su tiempo.
Quince minutos después
llegamos a Chenonceaux, el castillo más visitado del Valle del Loira, llamado
el Castillo de las Mujeres porque sus dueñas fueron, sucesivamente, Diana de Poitiers,
Catalina de Medicis y Luisa de Lorena.
Hay un puente sobre el
río que forma parte del castillo.
La cocina está en el subsuelo, es enorme y tiene
todos los utensilios a la vista.
Saliendo de Chenonceaux y
en camino a Chambord pasamos por la ciudad de Blois y por el palacio de la Marquesa de Pompadour.
El castillo de Chambord
es público, a diferencia de la mayoría que son privados, y es el más grande del
valle. Ideado como coto de caza por el Rey Francisco I, el predio donde se
encuentra tiene la misma superficie que la ciudad de París.
Dentro no hay grandes
cosas, sólo algunos muebles de época, una exposición de pintura moderna y otra
de carruajes.
Paramos a tomar un
cafecito en un pueblito llamado Argenton sur Creuse.
Llegamos a Limoges a las
8 de la noche. Comí en el restaurant del hotel con Cristina, que es chilena y
vive en Temuco, y su hija Nicole.
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