Domingo 28/10/2018. Dormí mal, hubo música hasta tarde en la zona. Así se veía Manizales desde el desayunador del hotel.
Tomé un taxi para ir hasta el aeropuerto, que se llama La Nubia. Es pequeñito, pero llegan y salen aviones de Avianca y Latam bastante seguido.
Tomé un turbohélice que en 40 minutos llegó a Bogotá.
Me dejó en el Puente Aéreo, que es otra terminal de El Dorado, donde llegan los vuelos de cabotaje. De allí tomé un ómnibus que me dejó en la terminal de vuelos internacionales.
A las 20.30 salió el avión a San Pablo. Dormí mucho.
Lunes 29/10/2018. Llegó a San Pablo a la madrugada. Tuve que esperar un rato a que saliera el vuelo a BA. En el aeropuerto tomé un café con un pao de queijo riquísimo.
Tomé un taxi para ir hasta el aeropuerto, que se llama La Nubia. Es pequeñito, pero llegan y salen aviones de Avianca y Latam bastante seguido.
Tomé un turbohélice que en 40 minutos llegó a Bogotá.
Me dejó en el Puente Aéreo, que es otra terminal de El Dorado, donde llegan los vuelos de cabotaje. De allí tomé un ómnibus que me dejó en la terminal de vuelos internacionales.
A las 20.30 salió el avión a San Pablo. Dormí mucho.
Lunes 29/10/2018. Llegó a San Pablo a la madrugada. Tuve que esperar un rato a que saliera el vuelo a BA. En el aeropuerto tomé un café con un pao de queijo riquísimo.
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