viernes, 6 de abril de 2018

VIAJE A MALTA - ÚLTIMO DÍA (EL PALACIO DEL MARQUÉS DE PIRO Y MARSAXLOKK) Y REGRESO A BA

Martes 3/4/2018. La Casa Rocca Piccola es un palacio del siglo XVI cuyo propietario actual es el Marqués de Piro. Perteneció a un antepasado suyo caballero de la Orden de San Juan. Está muy cerca en la calle República y hoy fui a la visita guiada de las 10.
Esta es la entrada del palacio, que tiene más de cincuenta habitaciones, en la visita guiada se muestra sólo la planta baja y la primera planta, el marqués vive en la segunda.










La colección de piezas de ajedrez.




Reloj con una sola aguja.




Desde este cuarto se ve la iglesia que está justo enfrente, y si abren la puerta se puede seguir la misa sin cruzar.


El comedor de verano con la mesa puesta.





Bajamos por una escalera que había en el patio para ver el refugio contra los bombardeos, antes había sido una cisterna.


En el patio estaba el loro.


Cuando salí del palacio quise entrar en la Catedral de San Juan para ver el cuadro de Caravaggio que hay allí,  pero desistí porque había una fila de 25 personas.


Fuera de la catedral estaban estos gatitos.


Fui a la Terminal de buses y tomé el 81 a Marsaxlokk. El transporte público en Malta es muy bueno, los buses son todos iguales y recorren ambas islas. Es frecuente y bastante puntual. Cada tramo vale 1,50 euro. El ticket se puede comprar en el bus, pero también se puede comprar una tarjeta que vale para 12 viajes o la que yo compré que es un pase libre por siete días.


Marsaxlokk es un puerto pesquero muy pintoresco, con todos los barquitos de colores. En el malecón hay un mercado que vende textiles y chucherías.





Esta es una escultura de un pescador en el malecón.



Alli enfrente no podía faltar una iglesia.


Los barcos malteses tienen pintados ojitos en la proa. Es una tradición fenicia para la buena suerte en el mar.


Hay restaurantes en el malecón, casi todos de pescado, pero yo comí pizza de cuatro quesos (y uno de ellos era de cabra), y tomé vino rosado maltés.



Volví a Valletta en el bus 81. A empacar porque mañana regreso a Buenos Aires.
Este departamento que alquilé está en un edificio antiquísimo,  de piedra caliza color ocre, como son la mayoría de los edificios en Malta.





Miercoles 4/4/018. A las 10 me fui caminando a la Terminal de ómnibus, y tomé el X4 que va al aeropuerto. Hice el check in pero como son distintas aerolíneas tengo que retirar mi valija en Londres, entrar al país y empezar el trámite de check in de cero en Latam.
Mientras tanto descubrí un KFC en el primer subsuelo, y había popcorn.


El aeropuerto de Malta no tiene mangas,


En menos de tres horas estaba en Heathrow, eran las 19,30. A las 19,45 llegué a Migraciones, y salí de allí a las 20,30. Mi vuelo salia de la terminal 3, tuve que caminar bastante y tomar el tren que conecta las terminales. Llegué al check in de Latam corriendo a las 20,50. Después tuve que pasar por el escaner y caminar, y llegué a la puerta de embarque 21,25. El vuelo tenia hora de salida 22,10 y estaban embarcando.

Jueves 5/4/2018. Llegamos a San Pablo a las 6 de la mañana. El vuelo fue muy tranquilo y no iba lleno. Como siempre me senté en un pasillo, había una chica en la ventanilla y nadie en el medio. Dormí muchas horas y vi capítulos de "The Big Bang Theory", que es tan divertida.
La comida de Latam es muy buena, de cena comí carne con papas y de desayuno, waffle con arándanos y frutos rojos y ensalada de frutas.
Pasé varias horas en San Pablo hasta que salió mi vuelo a Buenos Aires.


En Ezeiza han implementado un sistema automático de entrada al país para argentinos que ahora mucho tiempo.  Hasta el próximo viaje!

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