martes, 22 de julio de 2014

VIAJE A FRANCIA - DE BUENOS AIRES A PARIS

Domingo 20/7/2014. A las 18 hs. salió puntual el vuelo a San Pablo y llegó en un poco más de dos horas. Esperé un rato el vuelo de TAM a París, que salió con retraso, aparentemente porque estaba esperando pasajeros de otros vuelos.

Lunes 21/7/2014. Llegó a París a las tres de la tarde. En el aeropuerto, los europeos, los estadounidenses y los chinos tenían trato preferencial. A los demás nos hicieron hacer una fila de más de media hora. Cuando finalmente me encontré con mi valija busqué la hoja donde tenía anotado cómo tomar el tren, donde bajarme y cómo llegar al hotel en el 13º arrondissement, y descubrí que no la tenía. Fui a la oficina de informes del aeropuerto y me indicaron cómo llegar a la estación de tren, y allí compré el ticket y me dieron un mapa.
Para tomar el tren primero tuve que tomar un tranvía que me llevó a otra terminal del aeropuerto. Allí tomé el tren que en 45 minutos me dejó en Denfert  Rochereau. Me bajé y tenía que tomar el metro. No había ventanillas ni nadie a quien preguntar e imaginé que el mismo boleto servía, y aparentemente así era.
Tuve que preguntar cómo llegar a Rue de Corvisart 6. Dejé mis cosas y me fui a caminar por el arrondissement 13º, que tiene aspecto de  ser un barrio de Buenos Aires. Está calurosa y húmeda París.



A una cuadra del hotel hay un colegio y un cartel que dice que más de 11400 chicos fueron deportados por los nazis con la anuencia del gobierno de Vichy. Escalofriante dato que no conocía.


Volví y a las 9 de la noche se me cerraban los ojos, y me fui a dormir. Todavía era de día.

Martes 22/7/2014. A las 7 de la mañana estaba desayunando. El desayuno del hotel es bueno, excepto por el café que es intomable.
Tomé otra vez el metro y bajé en Chatelet, buscando el bus turístico, porque había leído que paraba frente al Museo del Louvre. Estaba mirando mi mapa y una chica joven se paró, me preguntó si necesitaba ayuda, y como se dio cuenta que mi francés es precario me habló en inglés y me explicó cómo llegar. Esto para desacreditar las versiones que dicen que los parisinos son descorteses con quienes no hablan francés.
Encontré una oficina de France Turisme y allí compré el billete. El bus paraba enfrente. 
Di dos vueltas, crucé varias veces el Sena, ví Notre Dame, la Place de la Concorde, Champs Eiisees y el Arco de Triunfo, el Louvre, el Campo de Marte, la Torre Eiffel, la Opera Garnier y la Iglesia de la Madeleine. Desde aquí me volví en metro al hotel, estaba muy cansada.












Cuando volví hice la prueba de bajarme en la estación Glaciere en vez de en Corvisart, porque según mis anotaciones, que me olvidé impresas pero tengo en la computadora, estaba más cerca del hotel. Está más cerca, siempre que uno no camine para el lado contrario como yo hice. Cuando llegué al Boulevard Arago, por donde paseé ayer, me llamó la atención un edificio de piedra oscura de 100 metros de frente, sin ventanas ni carteles. Más tarde lo busqué en google maps y es la prisión de la Santé, en plena ciudad! El edificio tiene aspecto siniestro.

Cuando me recuperé volví a salir y caminé otra vez por el Boulevard Arago para el lado de Place d´Ítalie. Tomé café y compré galletitas porque mañana tengo que irme muy temprano a reunirme con mi tour a Normandía y Bretaña.

No hay comentarios:

Publicar un comentario