Miércoles 17/1/2018. No me puedo adaptar todavía a este horario. A las 4 de la mañana ya estaba bañada y vestida. El golpe en la espalda me duele mucho menos, el Ibupirac es milagroso y después de desayunar tomaré otro.
A las 8,30 salimos hacia la Plaza Tiannamen y la Ciudad Prohibida. La plaza tiene 500 metros de ancho y 800 de largo y es la más grande del mundo, escenario de la matanza de 1989 en la cual se estima que murieron 10.000 personas, aunque no hay cifras oficiales. Louis dijo que en la plaza no se podía hablar de este tema porque había espías. Alli hay un museo con la tumba de Mao.
Bajamos del bus y tuvimos que pasar un escaner para entrar en la plaza. Muchos militares, muchos grupos de niños y adolescentes y casi ningún occidental. Mayoría absoluta de asiáticos.
Caminamos mucho hasta llegar a la entrada de la Ciudad Prohibida. Alli está el retrato de Mao, como en los billetes.
Las puertas de la Ciudad tienen 81 salientes, nueve filas y 9 columnas, símbolo de la longevidad. Adentro se suceden pabellones y más pabellones, separados por enormes patios. Las habitaciones se pueden ver desde afuera, no entrar. Desde afuera se ve el trono del emperador de oro. Hay 9999 habitaciones. Es la que se veía en la película "El último emperador".
Más atrás hay más pabellones, y más, y grandes espacios abiertos. La escala del lugar es increible.
El ómnibus nos estaba esperando en la otra salida, recorrimos el lugar en una sola dirección.
Eran cerca de las 11,30 y fuimos a comer. Mesa con círculo central giratorio y empezaron a traer fuentes: arroz, sopa, té, pollo frito, carne y pollo con salsa de soja, verduras, sandía, todo junto y en cantidad desproporcionada. Incluye un vaso de bebida, a elegir entre cerveza, coca cola, Sprite o agua. Por lo general elijo cerveza que es muy pero muy suave.
Antes de la una ya habíamos comido y fuimos al Palacio de Verano, una construccion con enormes jardines al lado de un enorme lago congelado. En verano debe ser muy fresco, porque en invierno era como pasear adentro de un gran freezer.
La gente andaba en bicicleta sobre el lago congelado. Alli los emperadores pasaban los dias de mucho calor.
Después nos llevaron a un negocio donde vendían perlas de agua dulce. Ninguno compró nada y volvimos al hotel a las 15,30.
Le pedi a Louis que me indicara dónde podíamos ir más tarde, y me dijo que había un shopping muy cerca, que era un edificio blanco y redondo.
Dormí una hora y después salimos a buscar el shopping. El frío era tremendo, y no pudimos encontrarlo. Si vimos un Starbucks y un 7 eleven donde compramos unos sándwiches y chocolates.
A las 8,30 salimos hacia la Plaza Tiannamen y la Ciudad Prohibida. La plaza tiene 500 metros de ancho y 800 de largo y es la más grande del mundo, escenario de la matanza de 1989 en la cual se estima que murieron 10.000 personas, aunque no hay cifras oficiales. Louis dijo que en la plaza no se podía hablar de este tema porque había espías. Alli hay un museo con la tumba de Mao.
Bajamos del bus y tuvimos que pasar un escaner para entrar en la plaza. Muchos militares, muchos grupos de niños y adolescentes y casi ningún occidental. Mayoría absoluta de asiáticos.
Caminamos mucho hasta llegar a la entrada de la Ciudad Prohibida. Alli está el retrato de Mao, como en los billetes.
Las puertas de la Ciudad tienen 81 salientes, nueve filas y 9 columnas, símbolo de la longevidad. Adentro se suceden pabellones y más pabellones, separados por enormes patios. Las habitaciones se pueden ver desde afuera, no entrar. Desde afuera se ve el trono del emperador de oro. Hay 9999 habitaciones. Es la que se veía en la película "El último emperador".
Más atrás hay más pabellones, y más, y grandes espacios abiertos. La escala del lugar es increible.
El ómnibus nos estaba esperando en la otra salida, recorrimos el lugar en una sola dirección.
Eran cerca de las 11,30 y fuimos a comer. Mesa con círculo central giratorio y empezaron a traer fuentes: arroz, sopa, té, pollo frito, carne y pollo con salsa de soja, verduras, sandía, todo junto y en cantidad desproporcionada. Incluye un vaso de bebida, a elegir entre cerveza, coca cola, Sprite o agua. Por lo general elijo cerveza que es muy pero muy suave.
Antes de la una ya habíamos comido y fuimos al Palacio de Verano, una construccion con enormes jardines al lado de un enorme lago congelado. En verano debe ser muy fresco, porque en invierno era como pasear adentro de un gran freezer.
La gente andaba en bicicleta sobre el lago congelado. Alli los emperadores pasaban los dias de mucho calor.
Después nos llevaron a un negocio donde vendían perlas de agua dulce. Ninguno compró nada y volvimos al hotel a las 15,30.
Le pedi a Louis que me indicara dónde podíamos ir más tarde, y me dijo que había un shopping muy cerca, que era un edificio blanco y redondo.
Dormí una hora y después salimos a buscar el shopping. El frío era tremendo, y no pudimos encontrarlo. Si vimos un Starbucks y un 7 eleven donde compramos unos sándwiches y chocolates.
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