Miércoles 21/1/2015.
Desayuné muy rico, con café, tostadas y papaya. A las 9,30 me venían a buscar para ir a las comunidades indígenas.
Hacía frío a la mañana. Mientras tanto saqué fotos del hotel.
Esta es la calle Guadalupe Victoria, donde está el hotel:
Fuimos a Zinacantan, un
pueblo cercano donde había una fiesta religiosa. El guía recomendó no sacar
fotos dentro de la iglesia, está prohibido y son comunidades indígenas
autónomas que establecen sus propias reglas.
Afuera había mercado y
todos estaban vestidos con sus trajes típicos bordados, muy bonitos.
De allí nos llevaron a
una cooperativa textil donde nos mostraron los telares y nos convidaron tacos,
que son tortillas de maiz rellenas. Una mexicana que estaba en el grupo me dio la receta: se hierve el maíz, se lo muele y se agrega agua, se amasa y se estira formando una especie de panqueque que se cocina a la plancha.
Luego fuimos a San Juan
Chamula. Dentro de la iglesia el piso estaba cubierto con hojas de pino. Según
el guía los españoles obligaban a los indígenas a rezar en la iglesia y no en
el monte, por eso llevan el monte a la iglesia.
Gran cantidad de velas
arriba de las mesas y en el piso. La gente va allí a pedir por personas
enfermas, porque creen que la enfermedad es consecuencia de alguna mala
conducta.
El guía explicó que las
velas sobre las mesas son para agradecer y las velas en el piso son para pedir.
A la vuelta nos dejó en
la plaza de San Cristóbal. Volví al hotel y llevé mi ropa a lavar a la lavandería
que hay enfrente.
Después volví al centro,
comí pizza y fui al mercado, que es enorme, y donde venden de todo.
En el No 37 de esta misma
calle Guadalupe Victoria está el Museo Sergio Castro, pero ya intenté varias
veces y siempre lo encuentro cerrado.
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